El proyecto expositivo de Nisa Goiburu nos abre un espacio de parada y reflexión sobre nuestra relación con la naturaleza. A través de la fusión de poesía y pintura, el artista nos recuerda que somos inseparables de la tierra y que, en un momento marcado por el cambio climático, escuchar sus ritmos es más urgente que nunca. El título hace referencia a los pulsos que atraviesan a todo ser vivo —latidos humanos, susurros del viento, olas del mar, ciclo de las estaciones— como llamamiento para volver a conectar con lo esencial y tomar conciencia de la fragilidad de este equilibrio. La exposición contará, además, con visitas guiadas por el propio artista en las que las bases creativas y vitales de las obras se compartirán con el público.