Hace tiempo que a Blancanieves la llaman Verdenieves. ¿No lo sabías? Entonces te contaré una breve historia. Cuando Blancanieves era pequeña, solía enfadarse con su madrastra (ya sabes, aquella que pasaba el día entero preguntándole al espejo quién era la más bella del reino). En esos enfados, Blancanieves se iba al bosque y daba largos paseos hasta calmarse. Una tarde, se le hizo tan tarde que acabó durmiendo allí mismo, al pie de un haya. De repente, unas voces la despertaron: era una reunión de hayas, que estaban hablando sobre los destrozos y daños que los humanos estaban causando en el bosque y en todo el planeta. Al día siguiente, Blancanieves decidió que debía salvar las hayas, el bosque y el planeta entero, y para ello se convirtió en Verdenieves. Desde entonces, se pone sus gafas verdes y cada vez que los humanos están a punto de dañar el entorno, siente una alarma en su corazón. Por ejemplo, cuando se da cuenta de que su madre compra muy mal: va a la tienda y llena el carrito de mil cremas innecesarias, comida envuelta en plástico y, sobre todo, todo aquello que consume la reina de Biutifulandia. ¿Conseguirá nuestra Verdenieves que su madre se vuelva más ecologista? Este cuento, y otros más, podrás descubrirlos en esta sesión contra el cambio climático, donde además conocerás los gestos que están en nuestras manos para cuidar el planeta: consumo responsable, reciclaje, reutilización, reducción de emisiones…