El objetivo principal de esta actividad es que los participantes conozcan y pongan en valor el estado ecológico del entorno, utilizando para ello metodologías de ciencia ciudadana. Se analizan tres ejes principales a lo largo de la fase de desarrollo, la calidad del agua marina, la biodiversidad del litoral y el impacto humano.
En las dos primeras fases se conoce la fauna y flora que habita en la cala y alrededores, y se analiza el agua que es la principal característica del biotopo local, para saber si está sana o no. La observación de la biodiversidad se desarrolla a través de la «Guía costera de Jaizkibel-Ulia», utilizando prismáticos y lupas, el análisis del agua mediante equipos de laboratorio.
Por último, se desarrolla una recogida de residuos para poder conocer el impacto humano. Las recogidas de basuras marinas en calas y playas son una oportunidad perfecta para detectar y tomar conciencia de la degradación ambiental que provocan los residuos.
En MATER llevamos 22 años investigando la costa de Jaizkibel-Ulia, actividad que nos permite registrar año tras año los cambios que se producen en este entorno protegida y analizar el impacto que el cambio climático tiene en él.
